miércoles, 25 de julio de 2012

INTERVENCIÓN EN COMUNICACIÓN Y LENGUAJE EN NIÑOS CON TEA


Las alteraciones del lenguaje en autismo no se derivan de un trastorno específico  del lenguaje, sino que se enmarcan en el contexto de un trastorno severo y generalizado del desarrollo, que abarca diversos aspectos de la personalidad, el mundo cognitivo y simbólico y las reacciones comunes de los autistas.
– Belinchón, Igoa, Riviére, 1992.

La comunicación:

  • Es una actividad INTENCIONAL: o propositiva, de relación.

     • Es INTENCIONADA: se refiere a “algo” ( a un tema).
     • Se realiza mediante SIGNIFICANTES: mediante signos. 

Incapacidad innata para establecer con otras personas el contacto afectivo biológicamente previsto.
• Limitado uso de la mirada e incluso evitación.
• Falta de respuesta y atención al lenguaje de los demás.
• Dificultad para compartir emociones.
• Dificultad para percibir contingencias entre su conducta y        la conducta de los demás.
• Dificultad para anticipar la conducta de los otros.

Intención comunicativa:

Al integrar esquemas físicos y sociales aparecen las conductas comunicativas.
• Requisito:
– Tener conciencia de meta.
– Tener instrumentos y medios para conseguir la meta.
• Aparece a los 9 - 10 meses (desarrollo normativo).
Intersubjetividad secundaria:
Las dificultades de atención conjunta constituyen la expresión más clara de un déficit de intersubjetividad 
secundaria.
• Capacidad de considerar al otro como un sujeto, con un mundo interno, que puede ser compartido.Hay dos funciones esenciales en la 
comunicación:
– PROTOIMPERATIVA: cambiar el mundo físico (PEDIR).
– PROTODECLARATIVA: cambiar el mundo mental (COMPARTIR).
“La función esencial del lenguaje es la de
compartir”.
¿Qué ocurre con los niños con TGD?

Ausencia o escasa intención comunicativa.
• Ausencia de protodeclarativos.
• Alteración en los recursos no verbales para llamar la atención, pedir, mostrar desacuerdo, etc.
• No utilizan gestos para compensar sus dificultades en comunicación.
• Limitación de la mirada como recurso comunicativo.
• Ausencia de imitación como recurso de adquisición de nuevos aprendizajes.


Estrategias más usadas para la intervención:

Enseñanza por ensayos discretos
• Enseñanza de comunicación 
funcional
• Intervenciones naturalistas
• Comunicación aumentativaalternativa
• Enfoque social-pragmático








lunes, 2 de julio de 2012

Estrategias para la prevención de violencia



Estrategias para la prevención de violencia

Estas estrategias pueden ayudar a contrarrestar los factores de riesgo de violencia.

Estimular los factores "protectores"
Algunos de los factores protectores que pueden contrarrestar el impacto negativo de los factores de riesgo asociados con la violencia son:
Características individuales
Cociente intelectual alto, temperamento flexible y adaptable, personalidad llevadera, disfrutar de las interacciones sociales. Teniendo factores de riesgo similares, las niñas son mucho menos propensas a tornarse violentas que los varones.
Vínculos personales ("bonding"):Las relaciones fuertes y positivas con familiares, maestros u otros adultos pueden lograr que los jóvenes sientan que alguien tiene interés y se preocupa por ellos.
Adultos con creencias saludables y estándares claros:Los adultos pueden servir de modelo y demostrarle al joven que es posible tener éxito en la vida sin recurrir a la violencia.
Intervenciones al nivel individual:Acercarse a los estudiantes y mostrar un interés positivo en ellos.
Proveer acceso a tutores o mentores en la escuela o en los negocios, organizaciones de servicio, universidades o iglesias locales.
Ofrecer empleo a tiempo parcial u oportunidades de trabajo voluntario.
Estimular a los estudiantes a participar en actividades recreativas para jóvenes auspiciadas por la escuela o la comunidad, o en esfuerzos colaborados contra la violencia juvenil.

Estrategias de la escuela
Para crear un ambiente escolar seguro es necesario que se demuestre respeto, comunicación y responsabilidad mutua hacia los que nos rodean día a día. Un ambiente escolar positivo le brinda a los jóvenes herramientas necesarias para manejar los conflictos en formas no violentas. Las siguientes son algunas maneras de facilitar la creación de este tipo de ambiente:
Programas de consejería y para el manejo del coraje.
Programas de mediación y resolución de conflictos.
Un sistema confidencial que le permita a los jóvenes alertar al personal escolar sobre sus preocupaciones con relación a sus compañeros. Es importante recalcar la diferencia entre ser un "soplón" y proteger su seguridad.
Intervenciones de alcohol y drogas para los jóvenes y sus familias.
Enlaces con las agencias que le sirven a jóvenes y con las agencias policíacas en la comunidad.
Horario escolar extendido para actividades recreativas organizadas, cuido de niños, etc.
Clases sobre las destrezas de cómo ser buenos padres.
Centros de crisis localizados en la escuela con personal profesional que pueda trabajar con los jóvenes violentos. El centro también puede ser utilizado como un lugar para calmarse o "enfriarse".
Un equipo de crisis que incluya maestros, administradores y otro personal escolar.
Ofrecerle a todo el personal escolar adiestramientos sobre el manejo de jóvenes violentos.
Vigilancia por guardias y personal escolar.
Padres que trabajen como guardianes o asistentes de maestros.
Códigos de disciplina y vestimenta.
Políticas de cero tolerancia.
El Plan de Manejo de Incidentes debe incluir un Plan de Respuesta Después del Incidente.
Debe haber personal de Salud Mental disponible para ofrecer consultas y consejería a los jóvenes, al personal escolar y a la comunidad inmediatamente después de una crisis y al acercarse las fechas de aniversario.
Deben establecerse redes de ayuda mutua para los jóvenes que hayan sobrevivido una crisis y sus familiares.
Estrategias a nivel del distrito escolar

Los códigos de disciplina deben revisarse periódicamente y cumplir con las leyes federales, estatales y locales de educación. Es muy importante que las consecuencias se ajusten a la violación. Por ejemplo, puede usarse un estilo disciplinario de "sanciones progresivas". Las políticas de detención, suspensión y expulsión deben ser revisadas y claramente definidas para que el código de disciplina se haga cumplir de manera consistente, firme y justa.
Manejo de situaciones

¿Qué debo hacer si el joven hace una amenaza que lo pondría a él o a los demás en peligro inminente? Por ejemplo, si hay un arma presente.
Trate esta situación como una emergencia. Para intentar calmar la situación:
Alerte a la administración de la escuela para que se active el Plan de Manejo de Incidentes, y comuníquese con:
La policía
Un psicopedagogo o consejero escolar
Las agencias o recursos locales de salud mental
Los padres o guardianes
Mantenga la distancia. Trate de crear barreras entre usted y la persona o el arma.
Evite los movimientos corporales agresivos.
Haga preguntas abiertas para que el joven siga hablando.
Acepte el hecho de que usted no está en control de la situación. Evite proyectar autoridad.
No negocie con el joven. Usted no tiene con qué negociar. No mienta sobre su disponibilidad para ayudar.
El tiempo es su aliado. Intente mantener la situación bajo control hasta que llegue la policía o el psicólogo escolar.
Conozca bien el Plan de Manejo de Incidentes de su escuela, específicamente:
¿En qué consiste el "plan"?
¿Existe un equipo de crisis?
¿Cuál debe ser la función suya dentro del plan?
¿Qué sucede después de un incidente?
El conocer la respuesta a cada una de estas preguntas antes de que suceda una crisis lo preparará mejor a usted y a su escuela para actuar efectivamente. Para obtener más información sobre el manejo de conductas violentas o potencialmente violentas comuníquese  con las agencias policíacas locales y pregunte sobre los programas disponibles para escuelas en su comunidad.

¿Qué debo hacer si un joven que muestra algunos factores de riesgo hace una amenaza realizable, pero que no presenta un riesgo inminente?
No descarte la amenaza ni la trate como "palabras huecas".
Hable de inmediato con el joven.
Si el joven se niega a hablar, se muestra argumentativo, se pone a la defensiva, o continúa expresando pensamientos o planes violentos o peligrosos, coordine de inmediato una evaluación con un profesional cualificado de salud mental.
No deje al joven solo.
Comuníquese con:
La administración de la escuela
Un psicólogo o consejero escolar
Los padres o guardianes
La agencia local de salud mental
La policía, si parece necesario
¿Qué debo hacer si me sigue preocupando el joven?

En cualquier caso en que le preocupen las amenazas hechas por un joven, trabaje con la administración de la escuela para que el joven sea examinado por un profesional cualificado de salud mental. Aunque no existe un método infalible para identificar a los jóvenes potencialmente peligrosos, es preferible alertar a quienes pueden evaluar profesionalmente el riesgo de violencia.
Pasos para la evaluación y resolución de amenazas